No son 31 años

La vida no empieza, ni termina. La vida es un ciclo que avanza y camina. Un tropel de recuerdos que se acumula en el trastero. Un sueño indefinido que arde como un fuego. Una carretera tallada en la ladera de una montaña. Una canción tantas veces repetida que agota todas sus notas. Un pie delante de otro pie. Una frase escrita en la arena borrada por una ola. Un beso robado el la parada del autobús. Un corazón roto y cosido con remiendos encontrados en un baúl escondido en lo más profundo del sótano de tu casa. Un abrazo que se pierde en la lejanía de la memoria. Una caricia que recorre tu espalda, tus dedos, tu lengua y tu pelo. Un grito en mitad del desierto. Un consejo recibido a altas horas de la noche. Una veleta señalando en la dirección contraria al viento. Una oportunidad perdida, y otra, y otra, y otra. Un esfuerzo recompensado en cada trago. Un número de teléfono borrado de tu agenda. Una soledad envuelta en compañía. Un amargo adormecer en el abrazo más tranquilo de la tierra.

No son 31 años. Son 31 años de experiencias.

Comentarios

Entradas populares