Felices Fiestas
Felices Fiestas a todas.
A las que vinieron y se quedaron para siempre.
A las que vinieron, pasaron de largo y se fueron.
A las que nunca me apreciaron.
A las que siempre les debo algo.
A las que son como mi familia.
A las que me desprecian en cada palabra.
A las que sueñan despiertas poder cambiarme.
A las que toleran mis bombas de humo.
A las que nunca me comprenderán.
A las que el miedo les dio tanto vértigo que bajaron corriendo la escalera.
A las que lloraron conmigo cada litrona de cerveza.
A las que compartieron conmigo más que la cama.
A las que solo fui para ellas el colchón de plumas roto.
A las que mintieron en cada palabra.
A las que me espían cada noche sin atreverse a dar los buenos días.
A las que se aprovecharon de mí, me sorbieron el tuétano y escupieron las sobras.
A las que nunca fui capaz de apreciar como se merecían.
A las que me acompañaron en mis largas tardes de estudio.
A las que huyen ante cada peligro que asoma.
A las que no son capaces de sostenerme la mirada.
A las que no les importa lo que fui ni lo que seré.
A las que me abrazan aunque yo no lo pida.
A las que cada día nuevo les sorprende.
A las que se enamoran de mi sonrisa.
A las que se meten con mi pelo y mi forma de vestir.
A las que sonrío torciendo la boca y muriéndome por dentro.
A las que se llevaron lo que quisieron y a veces vuelven pidiendo más.
A las que son como hermanas a pesar de estar a medio mundo de distancia.
A las que te hacen reír sin que tú te lo esperes.
A las que el tiempo ni la distancia les importa.
A las que nunca te escriben ni te contestan.
A las que te prestan sus libros.
A las que respetan tu forma de pensar y tus ideas aunque no las compartan.
A las que no te importa recorrer 30km cada día para estar con ellas.
A las que cuentan contigo para cada plan descabellado.
A las que son tan sinceras que pierden una oportunidad entre mil.
A las que hacen siempre lo que les apetece sin importarle los demás.
A las que les importas una puta mierda.
A las que te dan lecciones cada día.
A las que aspiras a ser.
A las que borré su número de teléfono para nunca volver a hablar con ellas.
A las que desaparecen de repente.
A las que siempre están ahí aunque no las veas.
A las que te enseñan, te escuchan, te quieren y te ayudan.
Felices Fiestas a todas. Y a todas las que me dejo.
A las que vinieron y se quedaron para siempre.
A las que vinieron, pasaron de largo y se fueron.
A las que nunca me apreciaron.
A las que siempre les debo algo.
A las que son como mi familia.
A las que me desprecian en cada palabra.
A las que sueñan despiertas poder cambiarme.
A las que toleran mis bombas de humo.
A las que nunca me comprenderán.
A las que el miedo les dio tanto vértigo que bajaron corriendo la escalera.
A las que lloraron conmigo cada litrona de cerveza.
A las que compartieron conmigo más que la cama.
A las que solo fui para ellas el colchón de plumas roto.
A las que mintieron en cada palabra.
A las que me espían cada noche sin atreverse a dar los buenos días.
A las que se aprovecharon de mí, me sorbieron el tuétano y escupieron las sobras.
A las que nunca fui capaz de apreciar como se merecían.
A las que me acompañaron en mis largas tardes de estudio.
A las que huyen ante cada peligro que asoma.
A las que no son capaces de sostenerme la mirada.
A las que no les importa lo que fui ni lo que seré.
A las que me abrazan aunque yo no lo pida.
A las que cada día nuevo les sorprende.
A las que se enamoran de mi sonrisa.
A las que se meten con mi pelo y mi forma de vestir.
A las que sonrío torciendo la boca y muriéndome por dentro.
A las que se llevaron lo que quisieron y a veces vuelven pidiendo más.
A las que son como hermanas a pesar de estar a medio mundo de distancia.
A las que te hacen reír sin que tú te lo esperes.
A las que el tiempo ni la distancia les importa.
A las que nunca te escriben ni te contestan.
A las que te prestan sus libros.
A las que respetan tu forma de pensar y tus ideas aunque no las compartan.
A las que no te importa recorrer 30km cada día para estar con ellas.
A las que cuentan contigo para cada plan descabellado.
A las que son tan sinceras que pierden una oportunidad entre mil.
A las que hacen siempre lo que les apetece sin importarle los demás.
A las que les importas una puta mierda.
A las que te dan lecciones cada día.
A las que aspiras a ser.
A las que borré su número de teléfono para nunca volver a hablar con ellas.
A las que desaparecen de repente.
A las que siempre están ahí aunque no las veas.
A las que te enseñan, te escuchan, te quieren y te ayudan.
Felices Fiestas a todas. Y a todas las que me dejo.
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