18 de abril
Nunca te he dicho lo importante que eres para mí. Lo importante que has sido y sigues siendo. Lo mucho que me hiciste crecer, aprender, pensar y soñar. Lo mucho que lamento todos los errores que cometí. Lo mucho que recuerdo todos los buenos momentos que vivimos juntos.
Gracias por seguir ahí, por ser amiga, confidente y consejera. Gracias por enseñarme a levantarme, a indignarme, a luchar, a no rendirme y a ser más grande. No hay palabras que describan lo mucho que te quiero.
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