Medidas injustas de un gobierno deshonesto

Hoy es un día triste. Es un día triste porque un gobierno deshonesto ha tomado una medida muy injusta. Ha subido el IVA, igual que hizo en su día el gobierno anterior.

El IVA, un impuesto contra el que nadie se puede amparar y que demuestra que a esto lo llaman democracia, y no lo es. Un impuesto al que se le pueda dar una interpretación perversa: tenemos que pagar al Estado por nuestro derecho de comprar y vender. Cada vez que vendes algo o compras algo, un porcentaje del precio se le paga al Estado. ¿Dónde está eso que llaman el libre comercio?

Cada vez que trabajas, te pones enfermo, llevas al colegio a tus hijos, coges el metro, limpias tu casa o te suenas los mocos le pagas un dinero al Estado. Pagamos impuestos por una razón medianamente clara que a mucha gente se le olvida: por solidaridad. Pagamos para que el Estado proteja y beneficie a todos los habitantes del país. Pagamos por mejores carreteas, mejor atención médica, mejor gestión de los asuntos administrativos, mejor educación para nuestros hijos, energía más barata y limpia... Lo repetiré una y mil veces, un Estado NO ES una empresa. El objetivo de una empresa es obtener beneficios a partir de la venta o prestación de un servicio. El objetivo de un Estado es proteger los intereses de sus ciudadanos y proporcionarles mejores servicios a un precio que todo el mundo sea capaz de asumir. Incluso su deber es proporcionar servicios totalmente gratuitos. Si bien todos sabemos que no son gratuitos, sino que los pagamos entre todos con nuestros impuestos.

Solidaridad, una palabra que se le olvida a todos los cristianos de palo con los que me topo últimamente. Si nosotros enfermamos, ¿no querríamos que se nos siguiera pagando un pequeño porcentaje de nuestro sueldo? Nadie quiere enfermar o romperse una pierna si a cambio perdemos nuestro trabajo. Si tenemos una madre enferma, ¿no querríamos que alguien la cuidara y la diera un tratamiento médico de calidad, muchas veces con unos costes carísimos e inasumibles para muchas familias? Si nos han despedido y no tenemos ahorros ni medios de subsistir ni de pagar el colegio de nuestros hijos, ¿no querríamos que alguien nos diera un dinero mientras buscamos otro trabajo y nos pagara un colegio donde educar a nuestros hijos? Muchas veces olvidamos que hay personas en una situación mucho peor que la nuestra. Es muy fácil subirse a un pedestal y juzgar desde arriba sin ser juzgados.

Este gobierno es deshonesto porque ha incumplido cada una de sus promesas electorales. O yo aún diría más, este gobierno ha cumplido cada una de sus mentiras electorales. Este gobierno es mentiroso y cruel, se ceba en los más débiles y pones tristes excusas. Si el señor presidente del gobierno fuera realmente honesto, a los pocos días de haber ganado las últimas elecciones dictatocráticas habría salido por televisión y hubiera dicho algo así como: Las cuentas que nos hemos encontrado son mucho peores de lo que esperábamos. Para salir de esta situación nos veríamos obligados a recortar pensiones, sanidad y educación pública, subir los impuestos, reducir el sueldo a los funcionarios y decenas de cosas más que prometimos que jamás haríamos. Por lo tanto, me veo obligado a dimitir y a convocar unas nuevas elecciones generales. No podemos acometer estas reformas tan dolorosas cuando prometimos no hacerlo. Si estas medidas han de ser tomadas, no seremos nosotros quienes las tomen. Muchas gracias.

Pero no, este gobierno, en vez de defender los derechos de sus ciudadanos, se dedica a cuidar el dinero de los bancos. Los bancos son entidades privadas con intereses privados y beneficios privados. Cuidar el dinero de los bancos no revierte ningún beneficio para el Estado, es solo un agujero negro en el que se lapida dinero sin ton ni son. ¿Por qué este gobierno se preocupa más de entidades privadas que han demostrado ser ineficaces e ineficientes y no se preocupa por el futuro, la educación, la salud y el bienestar de sus ciudadanos? Este gobierno ha traicionado a todos menos a los bancos. Ha traicionado a los que no los votaron, y a los que sí lo hicieron. El descontento es grande. El paro ha subido. Se han reducido el gasto en servicios básicos y se han subido los impuestos para pagar la deuda de entidades privadas.

No solo eso, sino que encima ha comenzado una nueva cruzada contra los inmigrantes. Los inmigrantes, por encima de todo, son personas. Ya hemos olvidado cómo los españoles fuimos objeto de caza de brujas en Alemania durante la crisis del petróleo de finales de los 70. Iniciaron campañas de concienciación ciudadana cuyo mensaje era "los españoles le quitan el trabajo a los alemanes". ¿Te suena de algo? Ahora hay una cosa llamada Unión Europea libre de fronteras interiores, es decir, que no necesitas ningún visado para viajar a otro país de la Unión. Pero eso no siempre fue así. Y no lo es en EEUU o en Gran Bretaña, o en China, o en Japón. Las personas que van a otro país buscan unas expectativas de futuro mejores que las que hay en su país de origen. ¿En qué se diferencia un sudamericano que hace el turno de noche en el Burger King de tu barrio de un ingeniero español que viaja a Alemania en busca de trabajo? Te lo diré: en que el sudamericano busca ganar algo más de dinero para mandarlo a su familia en su país de origen. ¿Te imaginas a un ingeniero español mandándole dinero a sus hijos en España? Impensable. Tal vez incluso ese españolito gane el doble de lo que ganaría aquí en España, pero quizás le estén pagando menos que a un alemán por el hecho de que no conoce las leyes alemanas. Entonces, cuando llegue el día D a la hora H y haya que expulsar a todos los inmigrantes españoles de Alemania podrán decir: cobran menos que un alemán, por eso prefieren contratar españoles en vez de alemanes, ¡hay que echarlos a todos! ¿Te suena de algo? No es en absoluto descabellado.

Hoy es un día muy triste. El consumo se desplomará, el paro seguirá creciendo y el gobierno seguirá subiendo los impuestos para pagar la deuda de los bancos en vez de para solucionar todos estos problemas que ellos mismos se han creado. Si no aumenta el trabajo, aumentan los gastos por prestación de desempleo y se reduce el ingreso de impuestos (contratación, IRPF, consumo familiar...). Señor presidente del gobierno, usted tiene la llave a solucionar todos los problemas de este país, pero en vez de fomentar la contratación y luchar contra el desempleo, lo que ha hecho ha sido fomentar el despido con su reforma laboral y perseguir al desempleado como si fuera un criminal. Y mientras, los cabrones que se han forrado y han llevado a la ruina a este país tienen libre amnistía fiscal, beneficios fiscales y un puesto en su mesa.

El gobierno más deshonesto de nuestra joven dictatocracia. Y lo que nos queda. Y por no quedar, no nos queda ni Portugal.

Y para acabar, un poquito de humor para no pensar en tantos males: 

Somos Siniestro Total (Siniestro Total):